Camino por pesadas calles, sin evitar charcos de falsas baldosas, el día y la noche juegan a amarse, y la delgada division entre ellos la acaricia aquella trompeta, y los colores se cambian sus prendas para salir de noche, para embriagarse de viejas lamparas y ocultos besos, las aves quietas meditan en silencio, la música es orquestada por sonidos propios de la vigilia y un mundo distinto emerge.
Las pequeñas gotas viven lo que dura un salto, y puedo asegurarles que tienen mucho que contar
3 comentarios:
pequeñas gotas que penetran mi piel con cada palabra, cada instante, cada melodía...
pequeñas gotas silenciosas que recorren mi rostro con esta calle de música...
hermoso massi, es como dijiste aqule día "susurros de trompeta en mis oidos" ahora, esta noche iré a la cama con la nostalgia divina de un momento de amor...
un beso infinito, amigo!!!
"...un mundo distinto emerge."
Pero qué bonito, Max. Y qué maravilla leerte de nuevo. Te haces esperar de tal forma que cuando por fin llegan tus palabras la alegría es inmensa.
Besos para tí, niño quijote.
[Abrazo, Paula. Y beso]
Me encantó como narraste todo lo q acontece, haciendo hincapié en los sonidos, a partir de ese juego inventado por el día y la noche.
Muy lindooo!
Besos.
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